Municipales pasaron a planta permanente

Se llevó a cabo el acto de entrega del decreto de pase a planta permanente de cien empleados municipales que lograron así su estabilidad laboral, conforme al acta acuerdo que se firmó en junio entre el Sindicato de Trabajadores Municipales de Berazategui y el Ejecutivo y en el que se agasajó además a cuarenta y siete trabajadores que recibieron la medalla por haber cumplido con sus veinticinco años de servicio.
El mismo fue encabezado por el intendente Juan José Mussi y contó con la presencia del secretario general del STMB, Gabriel Carril Campusano y el secretario de Gremial e Interior de la Federación de Sindicatos de Trabajadores Municipales de la Provincia, José Luis Núñez, en representación del secretario general, Oscar Ruggiero.
Acompañaron al máximo dirigente del STMB en la ocasión su secretario adjunto, Jorge Esteban Maciel; el secretario de Prensa y Difusión, Fabián Ardile; la secretaria de Previsión Social y Vivienda, Graciela de los Santos; el secretario del Trabajador Jerárquico, Marcelo Bonino; la secretaria de Relaciones Públicas, Ceremonial y Cultura, Patricia Paredes; además de Cecilia Figlioli y Francisco Verón en su calidad de vocales titulares de la Comisión Directiva.
“Fue una jornada cargada de emociones y con mucha alegría ya que es un hecho de real envergadura para nuestra entidad que cien compañeros obtengan su estabilidad laboral, siendo todos ellos merecedores de la misma”, señaló el secretario general del STMB, Gabriel Carril.
Además, aseguró que “tanto yo como los miembros de la Comisión Directiva del Sindicato estamos muy satisfechos con este cierre de año, creemos que hemos cumplido con los compañeros y sentimos una enorme satisfacción”.
Con respecto al reconocimiento para los municipales que cumplieron sus veinticinco años de servicio, Carril señaló que “muchos de ellos han sido compañeros de trabajo y hemos compartido gran cantidad de horas como trabajadores municipales. Comparto la alegría de quienes logran su estabilidad laboral y también la nostalgia que de empezar a despedir a gente con la que uno sabe que no volverá a compartir horas de trabajo”.